jueves, 19 de abril de 2007

Sobre el amor ...

La distancia más corta entre dos corazones rara vez es la linea recta.

Favorecerse uno mismo frente al prójimo es fácil; amarse a uno mismo más que al prójimo puede ser mucho más difícil.

Tanto la autosatisfacción como el desprecio por uno mismo pueden ocasionar una gran urgencia por amar a otros, para huir del enigma que representamos para nosotros mismos.

Constituye un gran misterio que otra persona pueda encontrar en nosotros una seguridad de por vida, que somos incapaces de detectar en nosotros mismos ni por un momento.

En el amor, algunos atacan como si se rindieran, otros se rinden como si atacaran.

El desconfiado se resiste al amor durante años; luego, exhausto por la soledad, repentínamente confía con una arbitraria despreocupación.

La soledad se sobrelleva mejor compartiéndola con una persona amada.

El filósofo de bolsillo. Simon May.

No hay comentarios: